Un Blog diferente que intenta revivir la historia de las terapias de sanación, sus técnicas, sus luchas, los obstáculos, los Maestros, los consejos, su increible fuerza y también sus limites, atractiva pero complicada a la vez, parece una Gran Dama dificil de someter. !no se hace sanación, se Entra en sanación¡.
viernes, 27 de enero de 2012
Los 5 principios del Reiki
Los Gokais del Reiki empiezan con esta frase; "SOLO POR HOY"
1º No me irrito.
2º no me preocupo.
3º con agradecimiento.
4º me trabajo intensamente.
5º sere noble y respetuoso.
Esta pequeña frase es la base de los cinco principios que todo reikista debe llevar en su ser. Para algunos sonará como algo incompleto, y les despertará la incógnita:
¿qué es sólo por hoy?
La respuesta es TODO. Todo lo que vivimos y sentimos debe ser sólo por hoy, sólo por este instante.
Así es, la vida en si es sólo por hoy. Los momentos más importantes ocurren ahora, la única posibilidad de hacer o dejar de hacer algo es ahora. Lo de ayer está hecho, no puede ser cambiado. Lo de mañana no está a nuestro alcance. No hay nada que podamos hacer respecto a esos dos momentos. Nuestra vida se define por lo que es o no es ahora.
Incluso la consistencia de lo que somos, de cómo nos definimos, de cuan consecuentes nos mostramos con la imagen que tenemos de nosotros sólo se produce en el hoy.
La validez de nuestras creencias se define en nuestros actos presentes.
Y este “sólo por hoy” es importantísimo no sólo al momento de reinventarnos o afirmarnos, sino cuando afrontamos una enfermedad, una situación angustiante o incluso la felicidad. ¿Por qué llevar sobre la espalda toda la carga emocional de todos los días anteriores de nuestra vida, de nuestra enfermedad o de nuestro
problema o incluso de los momentos felices? O ¿por qué desear llevar sobre nosotros la carga de conjeturas a futuro sobre esas situaciones?
Vamos a empezar por el escenario positivo, porque seguro más de uno dirá, que hay de malo en llevar con nosotros los pasados días felices. A mí me pasa mucho con este asunto y me cuesta dejarlo atrás. Y es que claro, es grato recordar y no parece dañino, pero qué tan sabio es?
Engancharnos con esos instantes nos cierra a la posibilidad de nuevos momentos felices, plenos y diferentes.
Nuestra mente intentará compararlos, privándonos de degustar la originalidad de este instante y de
entregarnos sin restricciones. Nos perderemos del presente mientras nuestra mente sigue aprisionada y congelada en ese ayer. Nos incapacitamos para ver a nuestro alrededor y con ello, mientras recordamos podemos incluso poner en riesgo nuestra existencia.
Ahora veamos un escenario negativo, como una situación angustiante, enfermedad o un problema que parece más grande que nosotros. Si el día de ayer fue frustrante, qué beneficio nos traerá llevar esa carga negativa hoy. ¿Qué ganamos entrando con esa predisposición perdedora? Nada. Y si el día de ayer fue un éxito o representó un avance, de que provecho nos viene ahora? Al contrario, nos pondremos expectativas
que al no ser superadas se transformarán en decepción.
En resumidas cuentas, nada mejor que una hoja blanca para cada día! Todo nuevo para escribir,empezando sin ningún tipo de predisposición. Lo bueno del “sólo por hoy” es que nos enseña a desapegarnos. Sólo así podremos disfrutar a plenitud y superar con integridad. Incluso la opción de re-inventarnos las veces que queramos, está sustentada y garantizada en esta pequeña frase.
Solo por hoy seré feliz arrancaré de mi espíritu todo pensamiento triste y me sentiré más alegre que nunca, no me lamentaré de nada, agradeceré a Dios la alegría y felicidad que me regala.
Trataré de ajustarme a la vida.
Aceptaré el mundo como es y me adaptaré a él, si sucede algo que me desagrada no me mortificaré ni me lamentaré.
Agradeceré que haya sucedido, porque asi se puso a prueba mi voluntad de ser feliz.
Hoy seré dueño de mis nervios, de mis pensamientos,de mis impulsos,ya que para triunfar tengo que tener el dominio de mi mismo.
Solo por hoy trabajaré alegremente con entusiasmo y con amor, haré de mi trabajo una diversión y comprobaré que soy capaz de trabajar con alegría.
No pensaré en los fracasos, si las personas a quienes le tengo afecto me desprecian, lo ofreceré al divino.
Seré agradable, si comienzo a criticar a una persona, cambiaré la critica por el elogio, toda persona tiene sus defectos y sus virtudes.
Olvidaré los defectos y concentraré mi atención en sus virtudes evitaré conversaciones y discusiones desagradables.
Solo por hoy voy a eliminar dos plagas; la prisa y la indecisión, viviré con calma y con paciencia, porque la prisa es la enemiga de una vida feliz y triunfadora, no permitiré que la prisa me acose, ni que la impaciencia me abrume haré frente a todos los problemas con decisión y valentía y no dejaré ninguno para mañana.
No tendré miedo, actuaré valientemente, el futuro me pertenece, olvidaré lo desagradable del pasado, tendré confianza en que Dios ayuda a los que trabajan y luchan.
No envidiaré a los que tienen más dinero, mas belleza o más salud que yo.
Trataré de resolver los problemas de hoy, el futuro se resuelve a si mismo, el destino pertenece a los que luchan y vencen.
Solo por hoy tendré un plan que habré de realizar, si algo se me queda sin hacer no me desesperaré, lo haré mañana.
No pensaré en el pasado ni guardaré rencor a nadie, practicaré la ley del perdón, asumiré mis responsabilidades y no echaré la culpa de mis problemas a otras personas, comprobaré que Dios me ama y
me premia.
Haré un bien a alguien, ¿ a quién? quizás a mi mismo, buscaré a otra persona para hacerlo, sin que lo descubra.
Seré cortés y generoso trataré de pagar el mal con el bien.
Al llegar la noche comprobaré que Dios me premió con un dia de plena felicidad y le daré las gracias.
Y de mañana haré otro dia como hoy.
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